Blácguóter, ¡qué felómeno!
Bitácora de una caseta en la Feria del Libro de Granada.
¡Por fin viernes!
Es un viernes de locos. Casi no podemos ni sentarnos a desayunar por la mañana porque se nos olvidaron cosas en la caseta y en la librería. Decidimos que vamos a buscar una solución luego de tomar algo para poder aguantar el día, no podemos comenzar el último viernes de Feria con el cuerpo escombro que tenemos y encima sin desayunar, no señora.
Empieza el día, me toca caseta.
Pronto viene un cliente que estuvo el martes y se compró LA RIADA de Blackwater, que no se enganchaba con ningún libro, que no suele leer… aquel día le recomendé esta saga y aceptó. Hoy vino porque le quedaban dos capítulos para terminárselo y quería comenzar con el segundo, EL DIQUE… ESTÁ ENCANTADÍSIMO. Antes de irse, me informa que su tía va a venir a comprar LOS SEIS (que dicho sea de paso, su tía es clienta y vecina). Aquí la foto:
En toda la tarde vedimos tres veces los seis ejemplares de esta saga. La gente está aprovechando el descuento de la Feria para llevárselos todos juntos, y lo bien que hacen. Por supuesto, se nos acaban los primeros, los de LA RIADA
¡Por la tarde vino Andrés Neuman! Siempre es una alegría recibir a nuestro querido Andrés, en la librería, en la caseta, donde sea. Presentó su último libro y luego de firmar en la caseta oficial de firmas, vino a la nuestra a firmar ejemplares de PEQUEÑO HABLANTE y otros tantos de su obra novelística, de cuento y poesía.
Le visitan clientas de la librería, Irene y Carlos, Gema, y algunos paisanos de Argentina espontáneos que se enteraron que Andrés estaba con ¡¡¡Tremenda!!!
Mi madre, haciendo cosas raras.
Termina el viernes, estamos ya reventé. Dicen que mañana llueve, a ver qué pasa. De momento, nos vamos a casa, a comer algo y a descansar. Que fue un día precioso, de muchas emociones con la visita de Andrés y las superventas de Blackwater.
NOTA DE ULTIMA HORA: ya no quedan más de LA RIADA (el inicio de Blackawater) en toda la Feria, solo nos quedan a nosotras tres y solo tres. A ver lo que duran.