EL ÁRBOL VIENE, de Munir Hachemi.

Reseña de Alberto.

Tendemos a clasificar los libros según su género, su manera de narrar, la procedencia de la persona que lo ha escrito o si los ha recomendado una escritora famosa en un podcast. Munir Hachemi nos regaña cariñosamente por ello y nos invita a jugar con su última publicación, “El árbol viene”.

Porque es una de las conclusiones a las que llegas mientras estás leyendo: que Munir ha inventado un juego. Que estáis él y tú en el patio del colegio o en una velada de campamento y que te está contando la historia mientras hace gestos en el aire. Y que tu no estás comprendiendo nada pero su narración te atrapa y de vez en cuando te dice algo que te hace entender todo lo anterior. Y va saltando en el tiempo, como si estuviera por encima de todo. Y al final se te queda mirando con esa sonrisa gigante que siempre tiene en la cara como diciendo: “Ojalá hayas disfrutado de la historia al menos la mitad de lo que yo lo he hecho contándola.”

El árbol viene” es una historia de evolución, de cómo una población “coloniza” otro planeta o satélite o desierto lejano y crea su propia sociedad. Reflexiona sobre lo que está normalizado y lo que nos repugna, sobre que no hay un pensamiento estándar y que lo que a alguien le puede parecer usual a otro alguien le puede parecer aberrante. Y de cómo vemos desde fuera al diferente.

Munir maneja muy bien el lenguaje para deconstruir, como si fuera un Ferrán Adriá cualquiera, la manera que tenemos de entender una historia y, como las buenas escritoras y escritores, cree en nuestras altas capacidades de entendimiento y da por hecho que vamos a comprender todo porque tenemos todos los datos, que no hace falta que nos diga mucho. Y por eso, le amamos fuertemente.